Hace unos días, tras una larga conversación vía Skype con una amiga que también, como yo, forma parte de la diáspora cubana, no sé por qué decidí volver a leer este excelente e ingenioso libro de cuentos que su autora –Maritza Soler, nacida en Cuba, pero que desde finales del siglo XX vive en Venezuela-  tituló CUANDO LAS VACAS SALEN DE PASEO.  

Los treinta y tres cuentos del libro –cifra que no creo que sea casual- nos van a llevar a un mundo imaginativo que se acerca en muchos casos a las más clásicas historias de ciencia-ficción o, simplemente, a historias de terror que la autora, generosamente, matiza con altas dosis de humor para que nunca nos olvidemos de la eficaz terapia que representa la risa.  Eso sí, tengamos bien presente que la mayor parte de ellos están construidos sobre una dura realidad que se omite por muchas razones, alguna de la cuales han escapado -creo- del control de la mismísima señora Soler. Si opinan que estoy siendo un poco oscuro –cosa de las que acusan a muchos como yo en esta nada transparente era de la COVID- dejadme que os adelante un párrafo de mi cuento preferido, LA SEÑORITA ABIGAIL  Y LOS APLAUSOS, con el que creo que dejaré todo meridianamente claro:

“El Señor de los Discursos, que había llegado al poder después de una extraña lucha en las montañas, era el único autorizado para proclamar discursos. Abigail recordaba muy bien aquellos primeros años cuando todos lo amaban, precisamente, por sus casi diarias y extensas presentaciones en la plaza espaciosa, de día o de noche, bajo sol o bajo lluvia. Allí fue donde comenzó a prometer y donde comenzó a jurar que cumpliría con lo prometido. Prometía y volvía a prometer una nueva e idílica vida para todos los pobladores. Estos, bajo el influjo hipnótico de sus palabras, aplaudían hasta desfallecer. “

Con la mayor parte de las ingeniosas y divertidas historias que se nos cuenta Soler ocurre lo mismo que con la mencionada anteriormente y, tras ellas, como antes mencioné de forma menos clara -porque yo también he vivido en esos ambientes nada sanos-, están esos dos complejos telones de fondo, enrevesados y continuamente retocados por las "sagradas vacas" para enmascarar la realidad de esos opacos "planetas" donde ella ha vivido y vive.  Y si no se fían de lo que digo, comprobad ya, en el primer cuento, cómo Marcela -uno de los personajes- intenta mejorarla vendiendo lechugas y algo más. 

Como la primera edición de este libro es de 2012 y, que yo sepa, la autora no ha tenido relación fraternal alguna con Bill Gates os dejo a vuestra libre interpretación el paseo de las “vacas”, cuento con el que se cierra esta singular obra que tan altamente valoro.

Y no añado nada más, excepto comentar que este libro está disponible en versión kindle-unlimited, a los que recomiendo también bajarse la aplicación de Kindle para ordenadores: un placer añadido para poder  leer más cómodamente aún.